Nunca me gustaron los cantantes masculinos por quienes las chicas supuestamente tienen que morir de amor, tirarles bombachas al escenario, hacer cuadras de cola para ir a verlos, pagar una fortuna la entrada, gritar como locas hasta derramar lágrimas de emoción, ni Luis, ni Ricky, ni Ale, ni Ricardo (ni Arjona ni Montaner), ni Enrique, aunque de muy pequeña me gustaba Pablito (Ruiz).

Pero hay un santiagueño que se ha robado mi corazón, no se si por la voz dulce, las zambas que entona, la barba de semanas, la porra de meses, lo ciruja de subir al escenario de joggin y en patas...no se.

Me hipnotiza, en los recitales puedo estar las dos horas mirándolo tranquilamente, con cara de boba. Marta siempre me acompaña, le saca fotos, me saca fotos a mi, le vuelve a sacar fotos a él. Un día en una fiesta lo cruzamos bailando entre el resto de los mortales al ritmo de Dancing Mood; después de unos minutos de debatir si debíamos ir a saludarlo o no, y en caso afirmativo qué le íbamos a decir, nos acercamos tímidamente desde atrás y le tocamos el hombro....-Raly....hola, te queríamos saludar, lindo el show-
Él sonrió, dijo gracias y nos dio un beso a cada una mientras yo sin darme cuenta lo agarraba bien fuerte del brazo, lo solté y nos fuimos con Marta con las sonrisas de oreja a oreja como nene que consiguió el besito de Xuxa al final del programa.

El próximo martes El Raly brindará una conferencia de prensa con motivo del lanzamiento de un nuevo disco.
... Adivinen ¿Quién cubrirá dicho acontecimiento?